Las complejidades de implementar un operativo que eventualmente permita recoger el voto de tres o cuatro millones de mexicanos en el extranjero, que cuenten con credencial para votar y estén registrados en una lista nominal especial, son enormes. La intención de reconocerles sus derechos políticos, incluso cuando se han asentado en el exterior, es justa y va en concordancia con las nuevas tendencias internacionales hacia el reconocimiento de las ciudadanías múltiples y el ejercicio de potestades políticas transnacionales de las poblaciones migrantes. Los problemas mayores que enfrenta la iniciativa es el de la poca oportunidad con la cual se aprobó –aunque falta conocer la opinión del Senado , su aparente improvisación y la pobreza de recursos financieros con los que se está dotando al IFE para implementarla 400 millones de pesos . Sobre lo inoportuno de la iniciativa hay que señalar que se aprueba a siete meses de que comience el proceso electoral en octubre próximo, que se emite en el año en que se está realizando la redistritación del país y el reacomodo de más de 65 mil secciones con no más de 1,500 electores cada una, y que en este momento el IFE se encuentra estrenando consejeros noveles y que buena parte de su personal ejecutivo ha sido renovado o reubicado.
La improvisación de la iniciativa es evidente al dejarle al IFE la responsabilidad de prácticamente cualquier materia que demandara cierta precisión. No sabemos cuántos consejos locales y consejos extraordinarios se instalarán en el extranjero, ni dónde, ni cómo. No existe ningún acuerdo internacional que garantice el acceso a espacios públicos, ni tampoco alguna garantía de que la autoridad en el extranjero será tolerante ante las inevitables campañas mexicanas. Eso apenas se va a negociar. ¿Será posible en seis meses?
Los actuales consejeros generales no cuentan con mucha experiencia en materia electoral. Muchos de ellos ni siquiera hablan inglés o alguna otra lengua extranjera. El personal ejecutivo del IFE, excepto en la coordinación de Asuntos Internacionales, tiene nula experiencia en relacionarse con autoridades externas al país. Van a tener que reclutar a marchas forzadas a personal calificado –es decir, que al menos pueda comunicarse en inglés en el exterior, pero que no conoce la materia electoral mexicana. Será más práctico contratar a ese numeroso personal entre los mexicanos que ya viven en el exterior, para evitar exportar más paisanos fuera del país ahora como trabajadores del IFE. Pero muchos de esos paisanos ya han optado por una segunda ciudadanía, y estarían imposibilitados para ser consejeros, funcionarios electorales o de casilla, según lo señalado por el artículo 32 de la constitución, la Ley de Nacionalidad y el Cofipe (artículos 103, 114 y 120). Los resultados de muchas casillas y consejos se verían en riesgo de ser anulados en caso de demostrarse que algún funcionario tiene otra nacionalidad. ¿Quién podría investigar que todos ellos realmente posean sólo la nacionalidad mexicana?
Los riesgos son muchos, y no están siendo considerados suficientemente. Los partidos van a encontrar muchísimas vías para violar las disposiciones que contemplan las reformas del 22 de febrero pasado. Por ejemplo, se prohíbe contratar propaganda en medios extranjeros y limitarse a las retransmisoras mexicanas ¿cuáles? yo me pregunto . Cualquier persona por la libre puede contratar mensajes en los medios del exterior y difundir propaganda disimulada de opinión. ¿Cómo se sancionaría esta conducta? Hay prohibiciones de risa, como la señalada en el nuevo inciso 2 del artículo 190: “El día de la jornada electoral y durante los tres días anteriores no se permitirá la celebración ni la difusión de reuniones o actos públicos de campaña, de propaganda o de proselitismo electorales, tanto en territorio nacional como en el extranjero.” Eso sería ilegal en países donde la libertad de reunión y de expresión están sólidamente garantizados, como en los Estados Unidos. Y el inciso 4 dice: “Durante los ocho días previos a la elección y hasta la hora del cierre oficial de las casillas que se encuentren en las zonas de husos horarios más occidentales del territorio nacional así como en el extranjero, queda prohibido publicar o difundir por cualquier medio, los resultados de encuestas o sondeos de opinión”. Pero el huso horario más occidental es el de Samoa y las islas Midway, con seis horas menos que el horario central de México. Si hay mexicanos en esos recónditos lugares habrá que esperar a que cierren su(s) casilla(s) a las 12 de la noche del día de la elección para dar a conocer encuestas o resultados, lo que incrementará el riesgo de incertidumbre.
El destino de esta elección en el exterior es, al menos, dudosa. Ojalá no contamine al resto del proceso al interior del país. Demasiado hemos invertido para ahora volver sobre nuestros pasos.
Artículos de coyuntura publicados por Luis Miguel Rionda Ramírez en medios impresos o electrónicos mexicanos.
Antropólogo social. Profesor titular de la Universidad de Guanajuato y de posgrado en la Universidad DeLaSalle Bajío, México. Exconsejero electoral en el INE y el IEEG.
¡Los comentarios son bienvenidos!
Etiquetas
4T
Aborto
Academia
Agua
Alteridades
América Latina
AMLO
Antropologia social
Bicentenario
Campañas electorales
Candidatos independientes
Catolicismo
Ciencia política
Ciencia y Tecnología
Ciencias Sociales
Ciudad de Guanajuato
Ciudadanía
Conacyt
Conmemoraciones
Corrupción
Covid19
Coyuntura
Cuba
Cultura
Cultura política
Cultura popular y tradiciones
Delincuencia organizada
Democracia
Democracia participativa
Deporte
Derechos humanos
Derechos políticos
Desarrollo regional
Desarrollo social
Desastres naturales
Ecología
Educacion
Educacion superior
Elecciones
Estado de Guanajuato
Estudiantes
Ética
EUA
Familia
Federalismo
Función pública
Globalización
Gobernadores
Gobernanza
Gobierno federal
Guanajuato
Historia política
Historiografía
Homosexualidad
Identidad cultural
IEEG
IFE
IGECIP
impuestos
Indigenas y pueblos originarios
INE
Intolerancia
Izquierda
Juventud
La Radio
Lengua y lenguaje
León
Libros
Medio ambiente
Medios de comunicación
Memoria
México
Migración
Momias de Guanajuato
Mujeres y feminismo
Mundo
Municipios
Nacionalismo
Nuevas TIC
OPLEs
Organismos autónomos
Partidos políticos
Patrimonio
PEMEX
Personajes
Población
Poder judicial
Poder legislativo
Politica internacional
Posmodernidad
Redes sociales
Reforma electoral
Salamanca
Salud pública
Seguridad pública
Seguridad social
SEP
Sindicalismo
Socialismo
Sociedad civil
SOMEE
Terrorismo
Tribunal electoral PJF
UNAM
Universidad de Guanajuato
violencia política
Violencia social
Yo y mi circunstancia
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario